CÃÆ'³mo es posible saber

si estÃÆ'¡s detrÃÆ'¡s de una sonrisa

o te escondes otra vez.

Ves el mal ajeno y no ves tu realidad.

Eres la serpiente que mata por placer.

Bromeas con cenizas de un tiempo que acabÃÆ'³.

No trates de enseÃÆ'±arme, estoy de vuelta de aprender.

Mientras la inocencia se alimente de ilusiÃÆ'³n,

serÃÆ'¡s bufÃÆ'³n de turno sin nada que ofrecer.

No tientes a tu suerte, se puede acabar.

Doblas las campanas

al viento otra vez,

de nuevo me envÃÆ'­as al destierro.

Pero el deseo no calma mi sed,

tengo la fuerza y voy a vencer.

Mezclas tus delirios de grandeza en un papel,

donde no hay preguntas no puedo contestar.

Eres alimaÃÆ'±a y te alimentas de moral.

Ten mucho cuidado que puedes caducar.

MÃÆ'¡s de lo mismo dices.

CÃÆ'¡llate mortal.

Doblas las campanas al viento otra vez,

de nuevo me envÃÆ'­as al destierro.

Pero e deseo no calma mi sed,

tengo la fuerza y voy a vencer.



[Letra y mÃÆ'ºsica: Niko del Hierro]