Gritan en la oscuridad.

Fuego, me impide escapar.

Cada noche, puntual,

ocupa su lugar.

Es el dueÃÆ'±o,

su poder no puedes controlar.

Mira el reflejo de la humanidad.

SÃÆ'³lo hay un ser que mata por placer.

Y de nada servirÃÆ'¡ que implores su perdÃÆ'³n.

Barro, sangre, trueno y luz.

La bestia ya llegÃÆ'³.

Que se aleje de tus pensamientos.

Que en tus sueÃÆ'±os no tenga lugar.

Pronto despertarÃÆ'¡s del largo viaje.

Vuelta a la realidad.

AÃÆ'ºn se escuchan los gritos y llantos.

AÃÆ'ºn resuenan muy dentro de ti.

Ese olor especial a carne quemada.

Nunca te olvidarÃÆ'¡s del rompehuesos.



[Letra y mÃÆ'ºsica: JerÃÆ'³nimo Ramiro]